Con el uso de nuevas tecnologías se planea revolucionar el diseño de las carreteras, esto gracias a sensores y equipos de transmisión inalámbrica, llegando así las carreteras inteligentes, las cuales podrán detectar sus propios baches gracias al sistema conocido como ePave, el cual fue publicado en la revista científica suiza Sensors.
En este proyecto se encuentran trabajando en conjunto informáticos de la Universidad de Búfalo (EEUU) e investigadores de la Universidad de Chang'an (China), se basará en una red de sensores inalámbricos y autoalimentados, los cuales ofrecerán información en tiempo real acerca del estado de las carreteras, como la temperatura, la humedad o la presión que tenga.
Los desarrolladores decidieron usar la piezoelectricidad para alimentar los sensores, recargándose así por medio de presión ejercida al pasar por encima, la cual será brindada por los autos, estos sensores tienen un tamaño similar a un llavero y pueden colocarse a intervalos de 150 metros y transmitir su información a estaciones en un radio de 300 metros.
Los investigadores calculan que estos módulos tendrán una duración de 5 a 20 años, además de que recalcan que no se trata tanto de prevenir los accidentes, sino de detectar cuando ocurren, para poder enviar ayuda lo más rápido posible.
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