El puente buscará facilitar el tráfico de la ciudad, la cual esta congestionada, teniendo cerca de 20 millones de habitantes, por lo que se buscará conectar los principales distritos de Giza y se estima que el puente será utilizado por unos 750.000 vehículos al día.
La construcción de este puente trajo una gran indignación y molestia en los vecinos que habitan en las viviendas adyacentes a esta carretera, señalando que esta estructura está a solo 50 cm de los balcones de los edificios, además de que bloquea por completo el aire y la luz de los primeros pisos.
Mariam Rizk, un periodista del Servicio Árabe de la BBC, señaló: "Los residentes de estos edificios están preocupados por su privacidad así como por posibles accidentes de tránsito que tienen el potencial de poner en riesgo sus vidas"
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